Mareas

Mar, al mar entregado.
En la luz del faro prometido
se suben la esperanza y el grito
de quien hace del amor aullido.
Mar, tálamo de versos
que arrastra el llanto cómplice
de quien hace al desencanto su aliado.
Arriba, las estrellas devoran los deseos
entregados al vientre de la noche,
mientras olas contemplan encrespadas
el oleaje mítico de amantes,
entre sábanas de miel y furia desatada.
El mar abraza al náufrago
que entre dedos de algas se le entrega.
Perdió su rumbo y vaga a la deriva,
sin velas que al viento del amor
su ímpetu despliegue.
¡Ah, mar!De indecisas respuestas a la orilla
que recorre tu extensión y te pregunta.
Acaso una sirena se contagie
del húmedo beso que a la arena alcanza
y te sepa amar, eterno e inestable.