Pues seré paloma y luna
porque me gusta volar
y le hago guiños al aire
y describo con mis plumas
una elipse en pleno cielo
que me deja retozar.
Que yo soy potrilla inquieta,
hecha de espuma y de sal
y no quiero más cadenas
que las que el amor me da.
Quiero libre el arco iris,
quiero beber libertad
del agua que trae la lluvia
y no del viejo brocal
que me ponen en la boca
los amos de la moral.
Que me acusen de ligera,
de vida fácil y vana,
y el mismo que me condena
se quedará con las ganas
de seducir a la dama
que es objeto de sus penas.
Me dieron la mala fama
de arpía y concuspicente,
aquellos que en mala suerte
no triunfaron en la cama
con sus mujeres decentes.
Cállense los aburridos
que frenan al alma alegre.
Ocúpense de sus vicios
y que el diablo se lleve
a los que piden suplicio
por disfrutar amor breve.
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